• Nintendo estaría presionando al gobierno de Japón para frenar el uso de la inteligencia artificial generativa.
  • La empresa busca salvaguardar su extensa propiedad intelectual frente a posibles infracciones.
  • Se suma a la creciente preocupación global sobre los derechos de autor en la era de la IA.

Nintendo ha tomado medidas para influir en el gobierno japonés y contrarrestar el creciente uso de la inteligencia artificial generativa. La noticia ha surgido a través de comentarios de Satoshi Asano, miembro de la Cámara de Representantes de Japón, quien ha estado recopilando opiniones públicas sobre temas relacionados con la IA. Asano reconoció la utilidad de estas herramientas, pero subrayó los riesgos que plantean para los derechos de los creadores, citando casos legales recientes tanto en Japón como a nivel internacional.

La preocupación de Nintendo se alinea con la de otras grandes corporaciones y medios de comunicación que han emprendido acciones legales contra empresas de IA por el uso no autorizado de sus contenidos. El gobierno japonés ya está considerando medidas, como la publicación de guías para el uso de IA en la creación de contenido, que aconsejan verificar si las obras generadas por IA se asemejan a material con derechos de autor. Algunas compañías, como DeNA, optan por desarrollar sistemas de IA entrenados exclusivamente con datos propios.

La compañía, conocida por su férrea defensa de su propiedad intelectual, estaría realizando esfuerzos de lobby directos con el gobierno. Aunque los detalles de estas actividades son escasos, reflejan la estrategia de Nintendo de asegurar una protección legal robusta para sus activos creativos. Asano ha indicado que su partido promoverá el uso ético de la IA y explorará regulaciones más estrictas, incorporando el feedback de los creadores en futuras discusiones políticas. El impacto final de estas gestiones dependerá del equilibrio que el gobierno japonés logre entre la innovación en IA y la protección de los titulares de derechos.