- Netflix oficializa la compra de Warner Bros. Discovery por 82.700 millones de dólares, integrando Warner Bros. Games en su estructura.
- La plataforma adquiere derechos exclusivos de explotación en videojuegos de franquicias como DC Comics, Harry Potter, El Señor de los Anillos y Mortal Kombat.
- El acuerdo transfiere la propiedad de estudios veteranos como Rocksteady, NetherRealm y Avalanche Software a la división de gaming de Netflix.
El panorama del entretenimiento digital ha cambiado para siempre este 6 de diciembre de 2025. Netflix ha completado la adquisición de Warner Bros. Discovery, una operación histórica que transforma a la compañía de streaming en un coloso del desarrollo de videojuegos. Al absorber la división Warner Bros. Games, Netflix deja atrás su enfoque exclusivo en títulos móviles para convertirse en propietario de una de las infraestructuras de producción AAA más potentes del mundo, capaz de rivalizar directamente con Sony y Microsoft.
Las licencias legendarias que ahora posee Netflix
La clave de esta operación no reside solo en la tecnología, sino en la propiedad intelectual. Netflix controla ahora los derechos para crear videojuegos de algunas de las marcas más rentables de la cultura pop:
- El Universo DC – Incluyendo los derechos de Batman, Superman y Wonder Woman, permitiendo la creación de un universo conectado de juegos de superhéroes.
- Harry Potter y el Wizarding World – Tras el éxito de Hogwarts Legacy, Netflix tiene vía libre para secuelas y nuevos títulos mágicos.
- Mortal Kombat – La icónica franquicia de lucha pasa a manos de la "N" roja, facilitando cruces con sus series de animación.
- El Señor de los Anillos – A través de los derechos que poseía WB, incluyendo la aclamada saga de La Tierra Media.
- LEGO – Control sobre la prolífica producción de videojuegos familiares de la marca.
- Game of Thrones – Posibilidad de desarrollar títulos de alto presupuesto basados en Westeros.
Estas adquisiciones otorgan a Netflix un catálogo de franquicias con una base de fans instalada de millones de usuarios, asegurando un interés inmediato en sus futuras producciones.
Joyas de culto y propiedad intelectual original
Más allá de las grandes licencias de cine y cómics, Netflix adquiere la propiedad total de franquicias originales creadas por los estudios de Warner y el inmenso catálogo histórico de la extinta Midway. A diferencia de los juegos licenciados, estas marcas pertenecen 100% a la editora, lo que otorga a Netflix libertad creativa absoluta para reiniciarlas o adaptarlas sin depender de terceros:
- F.E.A.R. y Condemned – Las aclamadas sagas de terror y acción en primera persona de Monolith Productions pasan a ser activos exclusivos de Netflix.
- Scribblenauts – La creativa franquicia de puzles, ideal para el público familiar, se integra perfectamente en la estrategia de catálogo casual de la plataforma.
- El legado Arcade de Midway – Netflix se convierte en dueña de clásicos retro como Gauntlet, Rampage, Spy Hunter y Joust.
Este fondo de armario permite a Netflix rescatar sagas dormidas muy queridas por los jugadores veteranos, diversificando su oferta más allá de los superhéroes y la fantasía épica.
Un ejército de desarrolladores bajo el mando de Netflix
Más allá de las marcas, Netflix ha heredado talento humano y estudios con décadas de experiencia. La nómina de desarrolladores que pasan a ser *first-party* incluye:
- Rocksteady Studios – Los aclamados creadores de la saga Batman: Arkham.
- Avalanche Software – El equipo detrás del mundo abierto de Hogwarts Legacy.
- NetherRealm Studios – Maestros del género de lucha liderados por Ed Boon (Mortal Kombat, Injustice).
- Monolith Productions – Aunque este esstudio acaba de cerrar, creemos importante mencionarlo por que les garantiza la patente del sistema "Némesis" de Shadow of Mordor.
- TT Games – Especialistas en la adaptación de franquicias al universo LEGO.
- WB Games Montréal – Responsables de Gotham Knights y expertos en el universo DC.
El impacto en la industria y el jugador
Este movimiento redefine la estrategia de Netflix a largo plazo. La compañía pasa de cerrar estudios internos pequeños a gestionar operaciones masivas de desarrollo.
- Capacidad inmediata para producir blockbusters AAA para consolas, PC y su propia nube.
- Sinergias transmedia totales: series de Netflix que se lanzan junto a videojuegos de alto presupuesto del mismo universo.
- Posible exclusividad de futuras entregas de Batman o Harry Potter en el ecosistema de Netflix.
Con esta compra, la industria contiene el aliento. Netflix ha dejado claro que su ambición en el sector del videojuego no era un experimento, sino una conquista total del mercado.