• Bungie reconoce que Destiny 2 tiene problemas para atraer una nueva audiencia.
  • La conclusión de la saga principal ha provocado una caída en la población de jugadores.
  • La compañía busca evitar que el juego se convierta en un "juego como servicio muerto" escuchando a los jugadores.

Bungie ha admitido públicamente que Destiny 2 enfrenta desafíos significativos para atraer y retener a una audiencia, especialmente a jugadores nuevos. En una entrevista reciente, el director del juego, Tyson Green, reconoció que, si bien la base de jugadores principales se ha mantenido leal, la llegada de nuevos participantes ha disminuido considerablemente en los últimos años. Esta situación presenta un obstáculo para un título concebido como un servicio, cuyo éxito depende de una afluencia constante de jugadores y de la capacidad de ofrecer contenido atractivo para todos los perfiles.

El desafío de mantener un juego como servicio

Green explicó que Destiny 2 ha experimentado un "endurecimiento constante de la audiencia principal" durante años. Esto significa que cada vez más jugadores veteranos permanecen activos, pero muy pocos jugadores nuevos se incorporan al título. Esta tendencia de "contracción" es problemática para un juego como servicio que busca expandirse y servir a sus jugadores principales con expansiones convincentes. La conclusión de la saga principal, con la expansión The Final Shape, provocó una caída notable en la población de jugadores, ya que los jugadores se sintieron satisfechos con el final, pero la partida de la historia principal dejó un vacío.

Lecciones aprendidas para el futuro

Desde una perspectiva empresarial, esta situación no es la ideal para Bungie, quienes desean continuar desarrollando el universo de Destiny. Green enfatizó la necesidad de seguir construyendo el juego y de intentar nuevas estrategias, a pesar de que la transición no se haya gestionado de forma completamente fluida. La compañía ha aprendido lecciones importantes sobre lo que los jugadores desean, distinguiendo entre los juegos como que escuchan a su comunidad y los que no. Bungie aspira a evitar convertirse en un "juego como servicio muerto" y a seguir evolucionando Destiny, escuchando activamente a su base de jugadores.

Nuevos horizontes y estrategias

La estrategia actual de Bungie se centra en la nueva saga Fate, que incluye la adición temática de Renegades. Sin embargo, la efectividad de estas nuevas direcciones, especialmente las colaboraciones de marcas como Star Wars, es un tema de debate, sobre todo cuando una parte significativa de la historia del juego está archivada. La dificultad para acceder a contenido previo puede disuadir a los jugadores potenciales. Bungie está aprendiendo de los errores pasados para asegurar la longevidad de Destiny 2.

El futuro incierto de Destiny

Existen rumores sobre el desarrollo de Destiny 3, aunque su viabilidad como un "as bajo la manga" para Bungie es incierta, especialmente considerando el desarrollo de su otro proyecto, Marathon. La compañía no puede permitirse cometer errores en sus próximos lanzamientos. La clave para Bungie reside en equilibrar la satisfacción de su núcleo de jugadores con la atracción de nuevas audiencias, un reto que define el futuro de Destiny 2 como servicio.