• Grand Theft Auto III fue un éxito comercial masivo tras su lanzamiento en 2001.
  • Dan Houser, exjefe de GTA, confiesa que nadie fuera de Rockstar creía en el proyecto.
  • El juego vendió 14,5 millones de copias y sentó las bases para el éxito de la saga.

La saga Grand Theft Auto es hoy un fenómeno global, con su quinta entrega aún liderando ventas una década después y la próxima sexta parte marcando el futuro de la industria. Sin embargo, es fácil olvidar que no siempre fue un éxito asegurado. Tras un primer juego bien recibido y un segundo que no alcanzó las mismas cotas, Rockstar se enfrentó a la incertidumbre con la tercera entrega principal.

El camino hacia el éxito de GTA III

Dan Houser, uno de los fundadores de Rockstar y antiguo responsable de la serie, compartió en una entrevista televisiva la sorpresa que supuso el rotundo éxito de Grand Theft Auto III. Houser, que dejó Rockstar en 2020, recordó la presión y la incertidumbre que rodeaban el desarrollo del juego, lanzado en 2001, un año complicado para la compañía.

Según Houser, el equipo sentía que GTA III tenía un potencial extraordinario: "Creo que todo el equipo pensó: 'esto podría ser increíble. Hay algo realmente mágico en esto'". A pesar de esta convicción interna, la percepción externa era muy diferente.

Expectativas externas frente a la visión interna

Houser admitió que, antes de su lanzamiento, la expectación fuera del estudio era mínima. "Hasta que salió, nadie fuera de nuestra empresa estaba muy entusiasmado con él", explicó. El juego llegó poco después de los atentados del 11 de septiembre de 2001, un contexto que, paradójicamente, aumentó el interés del público.

El impacto y legado de Grand Theft Auto III

Grand Theft Auto III se convirtió en el juego más vendido de 2001, alcanzando los 14,5 millones de unidades vendidas en todas las plataformas. Su éxito sentó un precedente, impulsando a sus sucesores a cifras aún mayores, con la saga superando los 450 millones de unidades vendidas en total.

Este título no solo consolidó la posición de Rockstar Games en la industria, sino que también redefinió el género de mundo abierto, influyendo en innumerables juegos posteriores. La visión audaz y la ejecución impecable de GTA III demostraron que, incluso sin una gran expectación externa, la innovación y la calidad pueden conquistar al público.