- Abogados son sancionados por presentar documentos con citas judiciales falsas generadas por inteligencia artificial.
- Las excusas van desde culpar a hackers hasta alegar desconocimiento del funcionamiento de la IA.
- Los tribunales buscan disuadir el uso irresponsable de estas herramientas, imponiendo multas y medidas disciplinarias.
La inteligencia artificial (IA) se ha convertido en una herramienta poderosa, pero su uso indebido en el ámbito legal está generando un problema creciente en los tribunales. Jueces de todo el mundo están lidiando con una avalancha de documentos que contienen citas judiciales inventadas por IA, lo que ha llevado a sanciones para los abogados que presentan estos escritos. Ante esta situación, han surgido una serie de excusas, a menudo inverosímiles, por parte de los letrados para intentar eludir las consecuencias de sus acciones.
El auge de las 'alucinaciones' de la IA en los tribunales
Desde 2023, se ha observado un aumento significativo en el uso de IA para redactar documentos legales, lo que ha derivado en lo que se conoce como 'alucinaciones' de la IA: la generación de información falsa, incluidas citas de casos inexistentes. Ante la detección de estos errores, muchos jueces recomiendan la admisión temprana del uso de IA, la humildad y la autoevaluación. Sin embargo, una revisión de 23 casos sancionados revela que no todos los abogados siguen este camino, optando en su lugar por excusas que los tribunales consideran poco creíbles, llegando incluso a mentir sobre su implicación.
Excusas comunes y sus variantes
Una de las justificaciones más recurrentes es la negación del conocimiento sobre el uso de IA en la redacción. Esto puede manifestarse como el desconocimiento de estar utilizando una herramienta de IA, como ocurrió con un abogado que confundió las vistas previas de IA de Google con resultados de búsqueda normales. Más frecuentemente, la culpa recae en subordinados o incluso en los propios clientes. En un caso en Texas, un abogado intentó desviar la responsabilidad hacia su cliente, quien supuestamente tuvo un papel importante en la redacción del documento erróneo, una defensa que el tribunal no consideró válida. Otra táctica habitual es alegar ignorancia sobre la propensión de los chatbots a 'alucinar' hechos. Recientemente, un abogado sancionado en Oklahoma admitió no esperar que ChatGPT generara nuevas citas cuando solo le pidió que hiciera su escritura 'más persuasiva'.
Las excusas más insólitas ante el uso de IA
Cuando las excusas habituales no surten efecto, algunos abogados recurren a argumentos aún más extraordinarios. En un caso en Nueva York, un letrado admitió inicialmente haber usado Microsoft Copilot, pero luego cambió su versión alegando que las citas falsas se debían a malware en su ordenador, afirmando haber sido 'hackeado'. El juez se mostró escéptico ante esta declaración 'increíble e infundada', especialmente ante la falta de pruebas de un borrador previo. Tras una pausa, el abogado volvió a su posición original, admitiendo el uso de Copilot pero negando ser consciente de su capacidad para generar casos falsos. Esta situación llevó al juez a imponer una multa de 1.000 dólares y a remitir el caso a un comité de ética.
Problemas técnicos y 'errores' de software
Otra defensa recurrente se centra en problemas técnicos. Un abogado en Alabama alegó un 'error embarazoso' debido a la dificultad de 'cambiar de ventanas en un portátil'. Explicó que, bajo presión y en circunstancias personales difíciles, optó por usar un complemento de Microsoft Word llamado Ghostwriter Legal en lugar de una herramienta de investigación oficial, ya que aparecía automáticamente en la barra lateral, evitando así el 'tedioso' cambio entre programas. El juez, sin embargo, señaló que la información de Ghostwriter Legal indicaba claramente que utilizaba ChatGPT como programa predeterminado, cuestionando la credibilidad de la defensa. El cliente, horrorizado, despidió al abogado, quien fue multado con 5.000 dólares por 'mala fe'. Otros abogados han recurrido a la IA debido a problemas de acceso a bases de datos legales como Westlaw o LexisNexis, alegando 'problemas de inicio de sesión'. Aunque los tribunales pueden mostrarse comprensivos con los problemas tecnológicos, la sanción suele recaer si el uso de IA no se admite de inmediato.
Consecuencias y advertencias para el futuro
Los abogados que utilizan IA de forma irresponsable se enfrentan no solo a multas, sino también a la desconfianza de los tribunales y a posibles medidas disciplinarias. En Illinois, un abogado fue sancionado en múltiples ocasiones, llegando a tener que devolver 6.925,62 dólares recibidos por su trabajo, además de una multa de 1.000 dólares. El tribunal consideró que su conducta era tan grave que implicaba una falta de honestidad y aptitud para ejercer la abogacía. Los jueces advierten que las sanciones básicas y las multas pequeñas no son suficientes para disuadir esta mala praxis, y que la responsabilidad de verificar la información generada por IA recae siempre en el abogado firmante. El uso de IA sin la debida diligencia se considera una práctica peligrosa que puede tener graves consecuencias para la carrera profesional.