• Los indicadores clave para cumplir el objetivo de limitar el calentamiento a 1,5 grados Celsius no están donde deberían estar.
  • El objetivo de abandonar el carbón es uno de los más difíciles, con un uso que ha alcanzado máximos históricos debido a la creciente demanda energética.
  • Aunque la energía solar y la financiación climática privada muestran un crecimiento prometedor, la financiación pública y las ventas de vehículos eléctricos han experimentado una desaceleración preocupante.

A pesar de los avances significativos en la última década, como la reducción de costes y la mejora de la fiabilidad de las energías renovables y los vehículos eléctricos, la humanidad no avanza lo suficientemente rápido para evitar los peores efectos del cambio climático. Según un informe publicado por una coalición de grupos ecologistas, todos los sistemas de alerta climática están en rojo y el tiempo para corregir el rumbo se agota.

El informe, que evalúa 45 indicadores sectoriales para medir el progreso hacia el objetivo del Acuerdo de París de limitar el calentamiento a 1,5 grados Celsius, concluye que ninguno de ellos se encuentra en la trayectoria deseada. Seis indicadores están 'desviados' (progresan, pero no lo suficiente), casi 30 están 'muy desviados' (el progreso es demasiado lento) y cinco van en la 'dirección equivocada', empeorando la situación. La eliminación progresiva del carbón, uno de los mayores contribuyentes a las emisiones de gases de efecto invernadero, es particularmente preocupante. A pesar de una ligera disminución en su cuota de generación eléctrica, el uso total de carbón alcanzó un récord el año pasado, impulsado por la demanda en China e India. Para cumplir los objetivos, el mundo necesitaría acelerar la eliminación del carbón diez veces, cerrando más de 360 centrales de carbón de tamaño medio anualmente y cancelando todos los proyectos en desarrollo. La continuación del uso del carbón a niveles récord impide directamente limitar el calentamiento a 1,5 grados.

Por otro lado, la cuota de vehículos eléctricos (VE) en las ventas de automóviles de pasajeros, que era un punto positivo en el informe anterior, ha mostrado una desaceleración. A pesar del éxito continuado en mercados como China, donde los VE representan casi la mitad de las compras de coches nuevos, las ventas en la UE y Estados Unidos se ralentizaron el año pasado. Sin embargo, la energía solar se destaca como una historia de éxito, con un aumento del 33% en la capacidad instalada a nivel mundial el año pasado, impulsada en gran medida por China. La financiación climática privada también ha experimentado un aumento significativo, pasando de 'muy desviada' a 'desviada'. La inversión económica en tecnologías limpias se está convirtiendo en un buen negocio, lo que representa un factor de esperanza. No obstante, la financiación climática pública, es decir, el dinero prometido por países ricos a los países en desarrollo, sigue estando 'muy desviada'.