• La producción de vehículos de Jaguar Land Rover se detiene por tercera semana consecutiva.
  • La compañía estima pérdidas de hasta 72 millones de libras (unos 100 millones de dólares) semanales.
  • Los proveedores expresan preocupación por la prolongada inactividad y el riesgo de quiebra.

Jaguar Land Rover ha anunciado la extensión de la paralización de su producción hasta, al menos, el próximo 24 de septiembre debido a un ciberataque sufrido a principios de mes. La compañía, propiedad del gigante indio Tata Motors, ha informado a sus empleados, proveedores y socios que la reanudación de las operaciones globales será un proceso controlado que requerirá tiempo. Este incidente ha obligado a detener la fabricación de vehículos, afectando a la cadena de suministro y a la actividad comercial.

La interrupción de la producción está generando importantes pérdidas económicas para la empresa. Según estimaciones del diario británico The Telegraph, las pérdidas semanales podrían ascender a 72 millones de libras (aproximadamente 100 millones de dólares), mientras que la BBC cifra el coste en al menos 50 millones de libras (unos 68 millones de dólares) por semana. La incapacidad de producir los cerca de 1.000 vehículos que la planta ensambla habitualmente agrava la situación financiera. La prolongada inactividad también ha generado inquietud entre los proveedores de Jaguar Land Rover, quienes temen no poder soportar un parón de esta magnitud y barajan la posibilidad de la quiebra.