- Las guerras de consolas han terminado, según Reggie Fils-Aime.
- Microsoft es vista más como una editora de terceros que como una competidora directa.
- La falta de competencia podría llevar a la stagnación de la industria y la innovación.
Reggie Fils-Aime, el expresidente de Nintendo of America, ha compartido su visión sobre el estado actual de la industria de los videojuegos. En una reciente entrevista, Fils-Aime afirmó que las llamadas "guerras de consolas" han llegado a su fin, un cambio significativo respecto a épocas pasadas de intensa rivalidad entre compañías como Sony y Microsoft.
El nuevo rol de Xbox en la industria
Fils-Aime considera que Xbox ha evolucionado de ser un competidor directo de PlayStation a posicionarse más como una gran editora de videojuegos que también produce hardware. Esta perspectiva sugiere que la dinámica de mercado ha cambiado, y que la estrategia de Microsoft podría centrarse en expandir su alcance a través de diversas plataformas, incluyendo las de sus rivales. "Creo que para su software, para que el software de Microsoft llegue a la mayor audiencia posible... creo que sería en su mejor interés encontrar formas de que el software de Xbox, más allá de Minecraft, llegue a la plataforma Nintendo", comentó.
La necesidad de expansión multiplataforma
El expresidente de Nintendo enfatiza la importancia de que Microsoft lleve sus títulos, más allá de los ya existentes como Minecraft, a la plataforma de Nintendo. Según Fils-Aime, esta estrategia permitiría a Microsoft alcanzar un público más amplio y, al mismo tiempo, evitaría la pérdida de oportunidades de innovación que surgen de la competencia.
El riesgo de la falta de competencia
La disminución de la competencia directa entre las principales compañías de consolas genera preocupación sobre el futuro de la innovación en la industria. Fils-Aime recuerda cómo la competencia en la era de la PlayStation 3 y Xbox 360 impulsó avances significativos, como los controles de movimiento popularizados por la Nintendo Wii. El temor es que, sin esta presión competitiva, la industria pueda estancarse, resultando en menos contenido novedoso y avances disruptivos para los consumidores.
La eficiencia de Nintendo y el apoyo a terceros
En otro orden de ideas, Fils-Aime elogió la eficiencia de Nintendo en el desarrollo de juegos, citando el caso de The Legend of Zelda: Tears of the Kingdom como ejemplo de un título masivo con un tamaño de archivo notablemente reducido en comparación con otros desarrolladores. Sugiere que Nintendo podría compartir esta experiencia con desarrolladores externos para la Nintendo Switch 2, facilitando la creación de contenido exitoso y optimizado para su plataforma. A pesar de esto, se muestra sorprendido de que títulos importantes de Xbox, como Halo: Campaign Evolved, no tengan planes de lanzamiento para la Switch 2, mientras que otros juegos sí lo hacen.
El futuro incierto de la innovación
La transición hacia un modelo de negocio menos centrado en la competencia directa plantea interrogantes sobre la continuidad de la innovación. Fils-Aime expresó su esperanza de que la industria no caiga en la complacencia, señalando que la aparición de contenido verdaderamente innovador parece ser cada vez más infrecuente. Esta preocupación subraya la importancia de mantener un ecosistema competitivo que impulse a las empresas a superarse y ofrecer experiencias nuevas y emocionantes a los jugadores.